Antología producida y presentada en la Biblioteca de la Legislatura de Córdoba.
LA TETERA
Hermosa
y vieja tetera
que en
mi comedor descansas,
de las
manos de mi abuela
que
tantas veces te usara,
me
resurge su recuerdo
juntas
vinieron de Italia.
Revives
aquellos días hace tiempo…
esos
días de mi infancia,
cuando
en el patio jugábamos
al
tejo con mis hermanas.
Abuela
de cabellos blancos,
a
merendar nos llamaba.
Estabas
sobre la mesa tetera
con
esa flor en tu panza,
flor
azul con hojas verdes
un
cisne me recodabas,
tu
cuello elegante y fino
tal
vez con trazos de magia.
Otoño,
mañana tibia, víspera de mi boda
hasta
mis manos llegabas.
Fue el
regalo de un tío
junto
a ese trozo de historia
generoso
me entregara.
Desde
mi sillón te observo
en un
mueble de mi casa
y
parece que me hablaras.
Me
cuentas del viaje largo…
que
mis abuelos hicieron
y en
sus baúles estabas.
No las
puedo contener
ruedan
por mi rostro lágrimas.
Tienes
corazón de abuela
española
es tu alma.
Por
siempre serás mi norte
¡hermosa tetera blanca!
Inés Q. de Monge
